Otro error fue el fracaso alemán a la hora de desarrollar un caza de largo alcance. Esto significó que la Luftwaffe no pudo escoltar a sus bombarderos hasta sus objetivos, y muchos fueron derribados por cazas de la RAF.
Finalmente, el servicio de inteligencia alemán no pudo proporcionar información precisa sobre la fuerza y las capacidades de la RAF. Esto llevó a la Luftwaffe a cometer varios errores costosos, como el bombardeo de Coventry en noviembre de 1940, que mató a más de 500 personas y destruyó gran parte del centro de la ciudad.
En conclusión, la Batalla de Gran Bretaña fue un punto de inflexión en la Segunda Guerra Mundial, y la derrota alemana se debió a una serie de errores, incluido el enfoque en bombardear ciudades, la falta de un caza de largo alcance y el fracaso de la inteligencia. .