2. Desarrollar y mantener una comprensión integral del enemigo. El Ejército debe tener un conocimiento profundo del enemigo al que se enfrenta, incluidas sus fortalezas, debilidades e intenciones. Esta información es esencial para desarrollar estrategias y tácticas efectivas para derrotar al enemigo.
3. Desarrollar y mantener alianzas y asociaciones efectivas. El ejército no puede luchar ni ganar guerras por sí solo. Debe trabajar estrechamente con otras ramas del ejército, así como con aliados y socios, para lograr sus objetivos.
4. Utilizar eficazmente los recursos. El Ejército debe aprovechar al máximo los recursos que tiene disponibles, incluidos personal, equipo y financiación. Esto significa planificar y ejecutar operaciones cuidadosamente y asegurarse de que los recursos se utilicen de manera eficiente y efectiva.
5. Aprende y adáptate continuamente. El Ejército debe estar aprendiendo y adaptándose constantemente para mantenerse por delante de sus adversarios. Esto significa mantenerse actualizado sobre las últimas tecnologías, tácticas y estrategias, y estar dispuesto a cambiar cuando sea necesario.
6. Comunicarse eficazmente. El Ejército debe poder comunicarse eficazmente con sus soldados, aliados y el público. Esto significa ser claro, conciso y oportuno en sus comunicaciones, y asegurarse de que la información sea precisa y confiable.
7. Realizar operaciones de forma ética y profesional. El Ejército siempre debe realizar sus operaciones de manera ética y profesional. Esto significa respetar los derechos de los civiles y los no combatientes y respetar las leyes de la guerra.
8. Esté preparado para el futuro. El Ejército debe estar preparado para los desafíos del futuro. Esto significa poder responder a una variedad de amenazas, incluido el terrorismo, los ciberataques y los desastres naturales.