Antes de la invención de la máquina de escribir, la mayor parte del trabajo administrativo lo realizaban hombres. Esto se debía a que el proceso de redacción de documentos a mano consumía mucho tiempo y requería un alto nivel de caligrafía. Sin embargo, con la máquina de escribir, escribir a máquina se volvió mucho más rápido y fácil, lo que significó que las mujeres podían comenzar a realizar el mismo tipo de trabajo de oficina que los hombres.