1. Para el pueblo judío:
- Prosperidad antes de la guerra :En muchos países europeos, los judíos habían hecho contribuciones significativas a la sociedad y logrado prosperidad en diversos campos, incluidos el mundo académico, los negocios y las artes.
- Integración Cultural y Religiosa :Muchas comunidades judías tenían una larga historia de convivencia pacífica junto a otros grupos religiosos y étnicos. Participaron activamente en la sociedad, contribuyendo al desarrollo cultural e intelectual.
- Igualdad Jurídica :En los años previos a la Segunda Guerra Mundial, muchos países habían otorgado igualdad legal a sus ciudadanos judíos, permitiéndoles participar plenamente en la sociedad y disfrutar de los mismos derechos que los individuos no judíos.
2. Para otros grupos objetivo:
- Activistas políticos :Los disidentes, los opositores políticos y las personas pertenecientes a grupos minoritarios a menudo se enfrentaban a persecución y represión incluso antes del ascenso de los nazis. Es posible que hayan sufrido discriminación, vigilancia o encarcelamiento por expresar opiniones disidentes o desafiar las ideologías predominantes.
- Minorías étnicas y religiosas :Al igual que los judíos, otras minorías étnicas y religiosas, incluidos los romaníes, los sinti y los testigos de Jehová, experimentaron diversos grados de discriminación y marginación en las sociedades de antes de la guerra.
Es importante señalar que las experiencias de las personas diferían significativamente según sus antecedentes y circunstancias específicas. Si bien algunos judíos habían logrado el éxito y la integración, otros se enfrentaban al antisemitismo y la discriminación. Además, los niveles de tolerancia y aceptación de diferentes grupos variaban entre los diferentes países y regiones de Europa antes del establecimiento de los campos de concentración.