A partir de abril de 1989, tuvo lugar una serie de manifestaciones encabezadas por estudiantes en la Plaza de Tiananmen, Beijing. Los manifestantes pidieron una mayor democracia y libertad de expresión en China. El gobierno chino respondió enviando tropas y tanques a la plaza, y el ejército abrió fuego contra los manifestantes, matando a muchos e hiriendo a miles más.
La masacre de la Plaza de Tiananmen marcó el final de las protestas, y el gobierno chino ha seguido suprimiendo cualquier mención del evento para mantener su poder.