* El pánico de 1837: Esta crisis financiera provocó una fuerte caída de la actividad económica y provocó un desempleo generalizado. El pánico fue desencadenado por una serie de factores, incluida la especulación con tierras y materias primas, el endeudamiento excesivo de los bancos y una falta general de regulación en el sistema financiero.
* El auge del seccionalismo: A medida que Estados Unidos se expandió hacia el oeste, aumentaron las tensiones entre el Norte y el Sur por cuestiones como la esclavitud, los aranceles y las mejoras internas. Estas tensiones finalmente llevaron a la Guerra Civil, que destruyó el sistema estadounidense y marcó el comienzo de una nueva era en la historia estadounidense.
* La naturaleza cambiante de la economía estadounidense: Estados Unidos se estaba transformando rápidamente de una economía agraria a una industrial. Esta transformación condujo a una disminución de la importancia de la manufactura y a un aumento de la importancia de otros sectores, como el transporte y las finanzas. El Sistema Americano fue diseñado para promover la manufactura, por lo que no se adaptaba bien a las necesidades cambiantes de la economía.
Además de estos factores, también hubo una serie de factores políticos que contribuyeron al declive del Sistema Americano. Estos factores incluyeron el ascenso del Partido Demócrata, que se opuso a las políticas de nacionalismo económico del Partido Whig, y la elección de Andrew Jackson, quien fue un firme defensor de los derechos de los estados y del gobierno federal limitado.
En última instancia, el fracaso del sistema estadounidense se debió a una combinación de factores económicos, políticos y sociales. Estos factores llevaron al surgimiento de sistemas económicos alternativos, como el capitalismo de laissez-faire y la economía mixta, que reemplazaron al Sistema Americano como ideología económica dominante en los Estados Unidos.