La perspectiva lineal es una técnica que crea la ilusión de profundidad en una obra de arte bidimensional mediante el uso de líneas que se alejan en la distancia. Fue desarrollado en el Renacimiento y se basa en los principios de la geometría.
El arte arcaico, por otro lado, es el arte de la antigua Grecia y Roma. Se caracteriza por el uso de formas y formas simples, así como por su enfoque en la simetría y el equilibrio. El arte arcaico no utiliza la perspectiva lineal, sino que utiliza una variedad de otras técnicas para crear la ilusión de profundidad, como la superposición y el escorzo.