1. Aumento de la producción de alimentos: La revolución agrícola provocó aumentos sustanciales en la producción de alimentos. Los mejores métodos agrícolas, la rotación de cultivos y el uso de nuevas tecnologías, como la sembradora, hicieron posible producir más cultivos con menos mano de obra.
2. Crecimiento demográfico: El aumento del suministro de alimentos hecho posible por la revolución agrícola contribuyó a un aumento significativo de la población. La población de Europa se duplicó entre 1750 y 1850.
3. Movimiento del recinto: La revolución agrícola condujo al cercamiento de tierras comunales, que antes estaban disponibles para pastoreo y otros fines. Esta privatización de la tierra permitió prácticas agrícolas más eficientes, pero provocó malestar social y desplazamiento de las comunidades rurales.
4. Mecanización: La revolución agrícola vio el desarrollo y la adopción de nueva maquinaria agrícola, como trilladoras y tractores de vapor. Estas máquinas redujeron la necesidad de mano de obra e hicieron que la agricultura fuera más eficiente.
5. Urbanización: La revolución agrícola y la mejora de la productividad agrícola dieron como resultado un cambio en la fuerza laboral. Muchos trabajadores abandonaron las zonas rurales para buscar empleo en las ciudades, lo que contribuyó al crecimiento de los centros urbanos.
6. Aumento del comercio: El excedente de productos agrícolas resultante de la revolución agrícola permitió un mayor comercio entre países. Esto condujo al desarrollo de redes comerciales globales y al intercambio de bienes e ideas entre diferentes regiones.
7. Avances científicos: La revolución agrícola estuvo acompañada de avances científicos en áreas como la botánica, la química y la zoología. Estos avances contribuyeron a nuevas mejoras en las técnicas agrícolas y el rendimiento de los cultivos.
8. Cambios económicos: La revolución agrícola provocó importantes cambios económicos, incluido el aumento de la productividad, la especialización de la mano de obra y el surgimiento de nuevos mercados para los productos agrícolas. También condujo a un cambio de una economía principalmente agraria a una economía más diversificada.
La revolución agrícola tuvo impactos profundos y duraderos en la sociedad, la economía y el medio ambiente. Sentó las bases de la revolución industrial y dio forma a los sistemas alimentarios y las prácticas agrícolas del mundo moderno.