1. Disrupción económica:
- Las guerras a menudo provocaron una destrucción generalizada de propiedades, cultivos y ganado. Esto significó que muchas personas perdieron sus hogares, sus medios de vida y su capacidad de producir alimentos.
2. Aumento de impuestos y gravámenes:
- Tanto el gobierno escocés como el inglés impusieron fuertes impuestos y gravámenes a sus ciudadanos para financiar las guerras. Esto supuso una carga adicional para la gente corriente, que ya estaba pasando apuros.
3. Trabajo forzoso y servicios:
- Durante tiempos de guerra, los gobiernos a menudo exigían a los ciudadanos comunes que proporcionaran trabajo y servicios para apoyar a los militares. Esto incluía tareas como construir fortificaciones, reparar infraestructura dañada y transportar suministros.
4. Desplazamiento y flujos de refugiados:
- A medida que las guerras arreciaban, muchas personas fueron desplazadas de sus hogares debido a campañas militares o la destrucción de sus asentamientos. Se convirtieron en refugiados y tuvieron que depender del apoyo de otros para obtener alimento y refugio.
5. Aumento de la violencia y el bandidaje:
- Con la alteración del orden público durante tiempos de guerra, hubo un aumento de la violencia, el bandidaje y el crimen. Esto dificultó que la gente corriente pudiera viajar, comerciar o realizar actividades diarias de forma segura.
6. Peaje mental y emocional:
- La constante amenaza de violencia, pérdida e incertidumbre tuvo un costo emocional significativo en la gente común. Muchas personas tuvieron que lidiar con la pérdida de seres queridos, el trauma de batallas o actos de violencia y la interrupción de sus rutinas normales.
7. Participación política:
- Las Guerras de Independencia de Escocia también estimularon la participación política entre la gente corriente. Muchos se unieron a milicias locales o brindaron apoyo a la causa de la independencia, impulsados por un sentido de identidad nacional y resistencia contra la dominación extranjera.
8. Adaptación y resiliencia:
- A pesar de los desafíos, la gente común y corriente también demostró resiliencia y adaptabilidad durante estos tiempos. Buscaron nuevas formas de sobrevivir y sostener a sus comunidades, formando fuertes vínculos y redes para apoyarse unos a otros.