1. Optimismo posterior a la Segunda Guerra Mundial: El final de la Segunda Guerra Mundial en 1945 trajo una sensación de optimismo y esperanza a la nación, lo que llevó al deseo de formar familias.
2.Prosperidad económica: El auge económico de la posguerra generó mayores oportunidades laborales, salarios más altos y el deseo de ser propietario de una vivienda. Esta prosperidad proporcionó un entorno financiero estable para que las familias se expandieran.
3.La política del Gobierno y Beneficios:Las políticas gubernamentales, como el GI Bill, brindaron apoyo financiero a los veteranos, permitiéndoles continuar con su educación, comprar casas y formar familias.
4.Cambiar los roles de género: El cambio en los roles de género durante este período animó a las madres a centrarse en las tareas domésticas y la maternidad.
5.Expectativas culturales y sociales: Las normas culturales predominantes enfatizaban la importancia de la vida familiar y formar una familia se consideraba la norma.
6.Avances médicos: Los avances en medicina, como el desarrollo de vacunas y antibióticos, contribuyeron a una disminución de la tasa de mortalidad infantil, lo que llevó a una mayor supervivencia infantil.
7.Tecnología y comodidad modernas: Las tecnologías que ahorran mano de obra y los electrodomésticos facilitaron a las mujeres la gestión de las tareas domésticas, lo que les permitió asumir más responsabilidades en la crianza de los hijos.
8.Impulso del crecimiento demográfico: La propia generación del baby boom ayudó a sostener su crecimiento. A medida que la gran cohorte de baby boomers entró en sus años reproductivos en las décadas de 1970 y 1980, contribuyeron a un aumento continuo de la población.
Estos factores interconectados llevaron a un aumento significativo de la tasa de natalidad y a un posterior baby boom en los Estados Unidos durante la década de 1950.