Los británicos restringieron el comercio de los colonos. El gobierno británico aprobó leyes que prohibían a los colonos comerciar con otros países. Esto perjudicó la economía colonial y los colonos estaban enojados porque no se les permitía comerciar libremente.
Los británicos enviaron tropas para ocupar las colonias. El gobierno británico envió tropas a las colonias para hacer cumplir los impuestos y las restricciones comerciales. A los colonos les molestaba la presencia de estas tropas y sentían que se estaban violando sus derechos.
Los británicos intentaron reprimir las protestas de los colonos. El gobierno británico intentó reprimir las protestas de los colonos arrestando y encarcelando a sus líderes. Esto sólo enfureció más a los colonos, que se decidieron a luchar por sus derechos.
Los británicos finalmente aceptaron las demandas de los colonos. En 1776, el gobierno británico finalmente aceptó las demandas de los colonos y declararon la independencia. La Revolución Americana había comenzado.