Historia de Sudamérica

¿Cómo respondió Martín Lutero a las revueltas campesinas?

Martín Lutero inicialmente expresó cierto apoyo a las quejas y demandas de justicia social de los campesinos. Escribió en su folleto "Sobre la libertad de un cristiano" (1520) que "el poder de un príncipe es limitado... y los campesinos no están obligados a obedecer una ordenanza injusta de un príncipe que va contra el evangelio".

Sin embargo, a medida que las revueltas campesinas se volvieron más violentas y generalizadas, la actitud de Lutero cambió dramáticamente. Condenó enérgicamente las acciones de los campesinos, calificándolos de "turbas asesinas y saqueadoras" e instando a los nobles a reprimir las revueltas por la fuerza. En su folleto "Contra las hordas de campesinos asesinos y ladrones" (1525), Lutero escribió:"Por tanto, todo el que pueda, golpee, mate y apuñale, en secreto o abiertamente, recordando que no hay nada más venenoso, dañino o diabólico". que un hombre rebelde."

El cambio de gobierno de Lutero se puede atribuir a varios factores. Primero, le preocupaba que las revueltas dañaran la causa de la Reforma Protestante, que ya enfrentaba importantes desafíos por parte de la Iglesia Católica y el Sacro Emperador Romano. En segundo lugar, creía que las demandas de reformas sociales y económicas de los campesinos no eran realistas y sólo podían conducir a mayor caos y derramamiento de sangre. En tercer lugar, las propias opiniones de Lutero sobre el orden social estaban influenciadas por la jerarquía social tradicional de su época, que enfatizaba la autoridad de los gobernantes y la obediencia de los súbditos.

A pesar de la condena de Lutero a las revueltas campesinas, algunos reformadores radicales, como Thomas Müntzer, continuaron apoyando a los campesinos y su causa. Müntzer argumentó que los campesinos tenían derecho a resistir a los gobernantes opresivos y a establecer un orden social más justo y equitativo. Sin embargo, las revueltas campesinas finalmente fueron derrotadas y la nobleza reafirmó su control sobre el campesinado.