Historia antigua

¿A qué jugaban los niños medievales?

Los juegos de los niños en la Edad Media estaban determinados principalmente por su entorno, y muchos juegos reflejaban actividades y pasatiempos cotidianos. Algunos juegos comunes incluyen:

1. Caza y recolección: Los niños jugaban juegos que simulaban actividades de la vida real, como la caza y la recolección. Usaban palos, piedras y otros objetos para representar armas, animales y plantas, y participaban en cacerías simuladas.

2. Huesos de nudillos: Este juego involucraba pequeños huesos de las articulaciones de los animales que se lanzaban y se atrapaban en el dorso de la mano. El objetivo era colocar los huesos en un patrón u orden determinado, a menudo acompañado de rimas y canciones.

3. Aros y anillos: Los niños jugaban con aros de madera o metal, haciéndolos rodar por el suelo o usándolos como objetivos para arrojar objetos. Los anillos se pueden lanzar alrededor de palos colocados en el suelo o también sobre un objetivo.

4. Etiquetar y perseguir: Las variaciones de juegos de correr y perseguir, como la mancha, eran populares entre los niños, con reglas simples y sin necesidad de equipo especializado.

5. Juegos de pelota: Los niños practicaban varios juegos con pelotas, como atraparlas, lanzarlas y patearlas. Eran comunes juegos sencillos similares al fútbol moderno, o patear el balón hacia la portería.

6. El escondite: Este juego clásico implicaba esconderse en áreas designadas mientras el buscador intenta encontrar a los jugadores ocultos.

7. Muñecos y títeres: Los niños hacían muñecos y títeres con materiales de desecho como tela y madera, y los usaban para contar cuentos y juegos imaginarios.

8. Zancos: Los zancos se utilizaban para caminar a gran altura y eran populares porque a menudo implicaban habilidades y desafíos de equilibrio.

9. Canicas: Los niños jugaban con canicas, haciéndolas rodar hacia un objetivo o lanzándolas para golpearse entre sí.

10. Salto de rana: Los niños se tomaban de la mano o formaban filas para jugar al salto, en el que saltaban unos sobre otros mientras avanzaban en grupo.

En general, los juegos infantiles medievales eran en gran medida simples y a menudo se inspiraban en la vida diaria, fomentando la actividad física, la resolución de problemas y la interacción social entre los compañeros de juego.