1. Agricultura :Con el paso del estilo de vida nómada al sedentario, el desarrollo de la agricultura adquirió una importancia primordial. Se cultivaron cultivos como trigo, cebada y centeno, lo que generó un excedente de alimentos y permitió que las poblaciones crecieran. Se desarrollaron técnicas agrícolas, como sistemas de riego y rotación de cultivos, para maximizar los rendimientos y garantizar un suministro fiable de alimentos.
2. Cerámica :La capacidad de moldear y cocer arcilla para formar varias vasijas revolucionó el almacenamiento y transporte de alimentos y agua. La alfarería también permitió la creación de objetos artísticos, facilitando la expresión cultural y el comercio. Las tecnologías cerámicas continuaron evolucionando, lo que llevó a la producción de diseños complejos y vasijas especializadas para propósitos específicos.
3. Producción Textil :A medida que crecieron los asentamientos permanentes, aumentó la necesidad de ropa y otros productos textiles. Se desarrollaron técnicas de hilado, tejido y teñido, que permitieron la creación de una amplia variedad de tejidos a partir de lana, algodón y otras fibras naturales. Los textiles también se convirtieron en un medio importante para la expresión cultural y artística, y diferentes regiones desarrollaron estilos y patrones distintos.
Estas tres artesanías fueron vitales para la sostenibilidad de los primeros asentamientos permanentes y sentaron las bases para futuros avances en tecnología, especialización económica y desarrollo cultural en la civilización humana.