En 1507 acompañó a Luis XII a Génova, para la cuarta expedición a Italia. Después de Marignan, Francisco I conquistó a los milaneses y lo nombró condestable y virrey de los milaneses. En 1521 murió su esposa y Luisa de Saboya, madre de Francisco I, reclamó los feudos de los Borbones. El juicio que siguió le dio la razón. También se multiplicaron las afrentas al condestable. El condestable entabló negociaciones con Carlos V, pero el complot fracasó y el condestable tuvo que huir (1523). Sus bienes fueron confiscados y anexados al dominio real. Nombrado lugarteniente general del Emperador en Italia, luchó contra los franceses y ganó la batalla de Sésia, donde murió Bayard. Derrotó y hizo prisionero a Francisco I en Pavía en 1525. Abandonado por el emperador, que no quería satisfacer sus ambiciones, murió durante el asedio de Roma.
Muy cercano a Enrique IV, Maximilien de Béthune, duque de Sully, fue primero compañero de armas del rey, antes de convertirse en su ministro. Es uno de los que, sin negar jamás su fe calvinista, habría convencido a Enrique IV de convertirse al catolicismo para apaciguar al país. Ansioso por restaura