Efectos políticos: La Guerra de los Cien Años tuvo un profundo impacto en el panorama político de Europa. La guerra provocó el surgimiento del nacionalismo tanto en Inglaterra como en Francia, así como el declive del feudalismo. La guerra también resultó en el fortalecimiento de la monarquía en ambos países.
Efectos sociales: La Guerra de los Cien Años tuvo un impacto devastador en el tejido social tanto de Inglaterra como de Francia. La guerra provocó muerte y destrucción generalizadas, así como el desplazamiento de un gran número de personas. La guerra también provocó un aumento de la delincuencia y el malestar social.