Benjamín Franklin, por otro lado, fue un erudito de renombre y uno de los padres fundadores de los Estados Unidos. Conocido por sus contribuciones a la ciencia, la política y la literatura, Franklin fue una figura destacada durante su época. Sin embargo, a pesar de sus importantes logros, su fama a escala mundial y a través de generaciones no supera la del impacto y el reconocimiento duradero de Albert Einstein.