- Precisión: La información debe ser precisa y libre de errores.
- Relevancia: La información debe ser relevante para las necesidades e intereses del usuario.
- Puntualidad: La información debe estar actualizada y ser relevante para la situación actual.
- Integridad: La información debe ser lo suficientemente completa y completa para satisfacer las necesidades del usuario.
- Comprensibilidad: La información debe presentarse de manera clara y comprensible, utilizando un lenguaje que el usuario pueda entender.
- Verificabilidad: La información debe ser verificable a partir de una fuente confiable.
- Objetividad: La información debe ser objetiva e imparcial, sin opiniones personales o subjetivas.
- Seguridad: La información debe protegerse del acceso y uso no autorizados.
- Accesibilidad: La información debe ser accesible a los usuarios autorizados, independientemente de su ubicación o capacidades técnicas.
- Rentabilidad: La información debe estar disponible a un costo razonable y los beneficios de utilizarla deben superar los costos.
- Fiabilidad: La información debe ser consistente, precisa y confiable.
- Ética: La información debe obtenerse y utilizarse de manera ética, legal y respetuosa de la privacidad individual.
- Actuabilidad: La información debe poder utilizarse para fundamentar la toma de decisiones y tomar medidas.