- Invasión italiana: En octubre de 1935, Italia invadió Etiopía, buscando expandir su imperio colonial en África.
- Acción de la Liga de Naciones: La Sociedad de Naciones, una organización internacional destinada a promover la paz, condenó la agresión de Italia e impuso sanciones económicas al país. Sin embargo, estas medidas fueron ineficaces para disuadir la campaña de Italia.
- Conquista de Etiopía: En mayo de 1936, las fuerzas italianas habían capturado Addis Abeba, la capital de Etiopía, ocupando efectivamente el país.
- Reconocimiento por Poderes: A pesar de la condena internacional, varios países, incluidos Alemania y Japón, reconocieron la ocupación italiana de Etiopía, lo que debilitó la eficacia de las sanciones de la Sociedad de Naciones.
- Formación del Eje Roma-Berlín: La crisis de Abisinia tensó aún más las relaciones entre Italia y las potencias aliadas (Francia y el Reino Unido), lo que llevó a la formación del Eje Roma-Berlín, una alianza militar entre Italia y la Alemania nazi.
- Fin de la Sociedad de Naciones: El fracaso de la Sociedad de Naciones para prevenir la agresión de Italia condujo al declive y eventual disolución de la organización, poniendo de relieve las limitaciones de la diplomacia internacional para resolver conflictos.
En resumen, la crisis de Abisinia se resolvió mediante la conquista militar de Etiopía por parte de Italia, la respuesta ineficaz de la Liga de Naciones y los realineamientos geopolíticos que siguieron, lo que marcó un importante punto de inflexión en las relaciones internacionales y presagió el estallido de la Segunda Guerra Mundial.