Uno de los factores clave que contribuyó al surgimiento del apartheid fue el descubrimiento de valiosos recursos minerales, como oro y diamantes, a finales del siglo XIX. Esto provocó una rápida afluencia de colonos blancos, que llegaron a Sudáfrica en busca de oportunidades económicas. Como resultado, la población blanca creció significativamente, mientras que la población africana negra permaneció en gran medida marginada.
El creciente poder económico y político de la población de colonos blancos llevó a la implementación de políticas que discriminaban a la población africana negra. Estas políticas fueron diseñadas para mantener la supremacía blanca y garantizar que la minoría blanca continuara controlando los recursos y el poder político del país.
En 1910, se formó la Unión Sudafricana, que reunió a las cuatro colonias británicas de Cape Colony, Natal, Transvaal y Orange Free State. Esto marcó el comienzo de la segregación legalizada en Sudáfrica, donde a la población africana negra se le negaban derechos y libertades básicos.
Durante las décadas siguientes, se introdujeron una serie de leyes y regulaciones que consolidaron aún más el sistema de apartheid. Entre ellas figuraban la Ley de Tierras Nativas de 1913, que restringía la propiedad de tierras por parte de africanos negros a determinadas zonas designadas; la Ley de Áreas Urbanas de 1923, que controlaba el movimiento de africanos negros hacia las áreas urbanas; y la Ley de Registro de Población de 1950, que clasificaba a las personas según su raza y origen étnico.
El sistema de apartheid también se caracterizó por la expulsión forzosa de los africanos negros de sus hogares y comunidades, la supresión de la disidencia y el activismo políticos y la negación de los derechos humanos básicos a la población africana negra.
En resumen, los orígenes del apartheid en Sudáfrica surgen del contexto histórico del colonialismo británico, los cambios económicos y políticos que tuvieron lugar a principios del siglo XX y el deseo de la población de colonos blancos de mantener el control sobre los recursos y políticas del país. fuerza.