Filosofía legalista:Shi Huangdi fue un defensor del legalismo, una filosofía política que enfatiza la ley y el orden estrictos. Es posible que haya considerado esta ideología menos importante que mantener el poder absoluto y reprimir la disidencia.
Desarrollo agrícola:si bien la agricultura fue crucial para sostener el imperio, Shi Huangdi puede haberse centrado más en conquistas militares, proyectos de infraestructura y gobernanza centralizada en comparación con las políticas agrícolas.
Diversidad cultural:la ambición de Shi Huangdi era crear un imperio unificado y estandarizado. Es posible que haya restado importancia a las diferencias culturales y la autonomía regional para promover la cohesión, a pesar de la diversa herencia cultural de China.
Prosperidad económica:si bien el crecimiento económico y la prosperidad eran esenciales para la estabilidad del imperio, el enfoque de Shi Huangdi podría haberse centrado más en el control político, la fuerza militar y los grandes proyectos de construcción.
Pensamiento intelectual:Shi Huangdi era conocido por su pragmatismo y búsqueda de logros tangibles. Es posible que haya puesto menos énfasis en actividades intelectuales y filosóficas, como fomentar debates académicos o patrocinar académicos.
Vale la pena mencionar que las prioridades de Shi Huangdi podrían haber cambiado a lo largo de su reinado, y ciertos aspectos pueden haber tenido distintos grados de importancia en diferentes momentos. Su principal objetivo era consolidar y ampliar su poder, centralizar el gobierno y dejar un legado duradero para las generaciones futuras.