Alta demanda de mano de obra: La economía de las colonias de Chesapeake dependía en gran medida de cultivos comerciales como el tabaco y el algodón, que requerían una gran fuerza laboral. Los esclavos fueron obligados a trabajar largas horas en condiciones difíciles y, a menudo, murieron trabajando.
Aumento natural: Los esclavos tenían altas tasas de natalidad en las colonias de Chesapeake, lo que ayudó a aumentar la población esclava. Esto se debió a varios factores, como una mejor nutrición y una mejor atención médica, así como a la práctica generalizada de la reproducción forzada.
Trata intercolonial de esclavos: Las colonias de Chesapeake fueron un centro importante para el comercio intercolonial de esclavos, que implicaba la compra y venta de esclavos entre diferentes colonias. Este comercio trajo muchos nuevos esclavos a las colonias de Chesapeake.
El fin de la trata transatlántica de esclavos: A finales del siglo XVIII se abolió la trata transatlántica de esclavos, lo que redujo significativamente la oferta de nuevos esclavos. Sin embargo, los esclavos continuaron siendo obligados a reproducirse dentro del sistema de plantaciones, lo que ayudó a mantener el tamaño de la población esclava.