Durante la Guerra de Independencia de los Estados Unidos (1775-1783), aproximadamente 100.000 leales, también conocidos como conservadores o realistas, abandonaron los Estados Unidos hacia varios territorios británicos, incluidos Canadá, las Indias Occidentales, Gran Bretaña y Florida. Esta migración masiva se conoció como la Migración Leal de 1776 o la Gran Migración.
Razones para la migración
La migración leal fue impulsada principalmente por la victoria de los patriotas en la Guerra de Independencia de los Estados Unidos y el establecimiento de Estados Unidos como una nación independiente. Los patriotas tenían fuertes sentimientos antibritánicos y veían a los leales como traidores. Como resultado, muchos leales enfrentaron persecución, discriminación e incluso violencia.
A los leales a menudo se les despojaba de sus propiedades, se les negaban sus derechos civiles y se les obligaba a prestar juramentos de lealtad al nuevo gobierno. Algunos incluso fueron cubiertos de alquitrán y emplumados o fueron exiliados. Estos duros tratos llevaron a los leales a buscar refugio en otros lugares.
regiones de asentamiento
La mayoría de los leales optaron por trasladarse a Canadá, que permaneció bajo control británico. Las mayores concentraciones se establecieron en lo que hoy son Ontario, Nuevo Brunswick y Quebec. El gobierno británico proporcionó concesiones de tierras y otros incentivos para fomentar su migración.
Otros leales fueron a las Indias Occidentales, donde muchos tuvieron éxito como plantadores o comerciantes. Algunos afroamericanos leales, a quienes se les prometió libertad a cambio de su apoyo, también se establecieron en las Indias Occidentales o Gran Bretaña.
Un número menor de leales regresó a Gran Bretaña. Algunos eran terratenientes ricos que deseaban regresar a sus tierras ancestrales. Otros eran ex oficiales militares británicos o funcionarios gubernamentales que buscaban empleo en las fuerzas armadas británicas o en la administración pública.
Impacto de la migración
La migración leal tuvo un profundo impacto tanto en Estados Unidos como en Canadá. En Estados Unidos, la partida de los leales dejó propiedades abandonadas, trastornó comunidades y debilitó la economía. Sin embargo, también ayudó a solidificar la independencia de la nación y crear una sociedad más homogénea.
En Canadá, la afluencia de leales contribuyó al desarrollo de una nueva identidad británico-canadiense. Los leales trajeron consigo sus tradiciones, costumbres y puntos de vista políticos británicos, que dieron forma a la sociedad y la política canadienses. La migración también condujo al establecimiento de nuevos asentamientos, como Saint John, New Brunswick y Kingston, Ontario.
La migración leal fue un acontecimiento importante en la historia de América del Norte que dejó un legado duradero en Estados Unidos y Canadá.