1. Los ataques del 11 de septiembre y la guerra contra el terrorismo: La invasión estadounidense de Irak en 2003 fue parte de la estrategia más amplia de la administración Bush para combatir el terrorismo tras los ataques del 11 de septiembre. La administración Bush creía que Irak era una amenaza para Estados Unidos porque estaba desarrollando armas de destrucción masiva (ADM) y porque era sospechoso de albergar a terroristas de Al Qaeda. Sin embargo, nunca se encontraron armas de destrucción masiva en Irak y no hay evidencia de que Irak estuviera directamente involucrado en los ataques del 11 de septiembre.
2. Las secuelas de la invasión: La ocupación estadounidense de Irak fue caótica y violenta, con abusos generalizados contra los derechos humanos cometidos por las fuerzas estadounidenses y sus aliados. Estados Unidos tampoco planificó adecuadamente la reconstrucción de Irak, lo que generó un vacío de poder que fue llenado por la violencia sectaria y el surgimiento del Estado Islámico (ISIS).
3. La decisión de la administración Obama de retirar las tropas: En 2011, la administración Obama retiró la mayoría de las tropas estadounidenses de Irak y declaró que la guerra "terminó". Sin embargo, Estados Unidos continuó brindando apoyo militar al gobierno iraquí y envió tropas de regreso a Irak en 2014 para ayudar a combatir a ISIS.
4. El ascenso de ISIS: ISIS es un grupo militante islamista radical que surgió en Irak y Siria a principios de la década de 2010. ISIS rápidamente obtuvo el control de grandes extensiones de territorio en ambos países y cometió numerosas atrocidades contra civiles. Estados Unidos y sus aliados han estado realizando ataques aéreos contra objetivos de ISIS en Irak y Siria desde 2014, y Estados Unidos también ha enviado tropas a Irak para ayudar a entrenar y asesorar a las fuerzas de seguridad iraquíes.
5. La actual inestabilidad política en Irak: Irak ha estado plagado de inestabilidad política desde la invasión estadounidense de 2003. El país está profundamente dividido según líneas sectarias y hay una falta de confianza entre las diferentes facciones políticas. Esta inestabilidad ha dificultado que Irak se reconstruya y se recupere de la guerra.
La participación de Estados Unidos en la guerra de Irak ha sido larga y sangrienta, sin soluciones fáciles. Estados Unidos ha cometido muchos errores en Irak, pero también es importante recordar que Estados Unidos no es el único responsable de los problemas del país. El pueblo iraquí también ha sufrido mucho a causa de la guerra y merece vivir en paz y seguridad.