1. Individualismo rudo: Hoover creía firmemente en el individualismo rudo y el libre mercado. Creía que los individuos deberían asumir la responsabilidad de su propio bienestar en lugar de depender de la intervención del gobierno. Esta visión contrastaba marcadamente con el sentimiento creciente durante la Gran Depresión que pedía una participación más activa del gobierno para abordar la crisis.
2. Intervención gubernamental limitada: Las políticas de Hoover se centraron en una intervención gubernamental limitada en la economía. Se centró en brindar asistencia financiera a empresas y bancos en lugar de ayuda directa a individuos y programas de ayuda para los desempleados. Este enfoque resultó insuficiente para abordar las dificultades económicas generalizadas y no tuvo eco entre los votantes.
3. Falta de respuesta efectiva a la depresión: La Gran Depresión fue una de las crisis económicas más graves de la historia de Estados Unidos. La administración de Hoover fue criticada por su percibida respuesta lenta e inadecuada a la crisis cada vez más profunda. Los votantes sintieron que Hoover no estaba en contacto con el sufrimiento de millones de estadounidenses y que su enfoque de laissez-faire estaba exacerbando la situación.
4. Oposición política y popularidad: La popularidad de Hoover había ido disminuyendo incluso antes del inicio de la Gran Depresión debido a factores como su personalidad reservada, conflictos con el Congreso y políticas impopulares. A medida que la situación económica se deterioró, los índices de aprobación de Hoover se desplomaron y sus oponentes políticos capitalizaron la insatisfacción del público.
5. Contraste con Roosevelt: El rival político de Hoover, Franklin D. Roosevelt, presentó un marcado contraste en términos de su enfoque de la Depresión y su compromiso con el público. Roosevelt hizo campaña sobre una plataforma de acción gubernamental agresiva y ganó las elecciones presidenciales en 1932, lo que señaló el rechazo de las políticas de Hoover y el deseo de reformas gubernamentales más intervencionistas.
En resumen, los votantes no aceptaron las ideas de Hoover sobre el papel del gobierno durante la Gran Depresión debido a su creencia en un individualismo rudo, una intervención gubernamental limitada, la percepción de que sus políticas eran inadecuadas para abordar la crisis, su popularidad en declive y el contraste entre su enfoque y el de su oponente político.