1. Chispa inmediata: El asesinato encendió tensiones entre Austria-Hungría y Serbia. Austria-Hungría, apoyada por Alemania, vio el asesinato como una conspiración serbia para desestabilizar la región. Lanzaron un ultimátum a Serbia con duras demandas, incluido el arresto y castigo de los involucrados en el complot.
2. Ultimátum austro-húngaro: Serbia aceptó parcialmente el ultimátum pero rechazó algunos términos. Austria-Hungría, considerando esto como un desafío, declaró la guerra a Serbia el 28 de julio de 1914, después de que los esfuerzos diplomáticos fracasaran para resolver la crisis.
3. Movilización rusa: Rusia, un aliado eslavo de Serbia, comenzó a movilizar su ejército en apoyo de Serbia. Alemania, temiendo una guerra en dos frentes contra Francia y Rusia, lanzó un ultimátum a Rusia para que detuviera la movilización. La negativa de Rusia llevó a Alemania a declarar la guerra a Rusia el 1 de agosto de 1914.
4. Invasión alemana de Bélgica: Para derrotar rápidamente a Francia, Alemania invadió Bélgica, violando la neutralidad del país. Gran Bretaña, que había garantizado la neutralidad belga, declaró la guerra a Alemania el 4 de agosto de 1914.
5. Sistema de Alianzas: El complejo sistema de alianzas entre las potencias europeas creó un efecto dominó. Francia y Rusia eran aliadas de Serbia, mientras que Alemania y Austria-Hungría eran aliadas entre sí. Las acciones de un país desencadenaron las obligaciones de sus aliados, lo que provocó una reacción en cadena de movilizaciones militares y declaraciones de guerra.
6. Barril de pólvora de los Balcanes: La región de los Balcanes había sido durante mucho tiempo una fuente de tensión y conflicto en Europa. El asesinato y sus consecuencias llevaron estas tensiones a un punto crítico, provocando un conflicto europeo más amplio.
En conclusión, el asesinato del archiduque Francisco Fernando fue el catalizador que desencadenó una serie de acontecimientos y tensiones diplomáticas que culminaron con el estallido de la Primera Guerra Mundial. Si bien el asesinato por sí solo puede no haber sido suficiente para provocar la guerra, fue la inmediata detonante que encendió las rivalidades y alianzas preexistentes entre las potencias europeas, lo que en última instancia condujo al conflicto global.