- Cambio de los patrones del comercio global:Estados Unidos emergió de la guerra como una importante potencia económica e industrial, desafiando el dominio de Gran Bretaña en el comercio global. Estados Unidos había aumentado considerablemente su capacidad manufacturera durante la guerra y sus exportaciones crecieron rápidamente en el período de posguerra.
- El auge del nacionalismo y el proteccionismo:Después de la guerra, muchos países adoptaron políticas de nacionalismo económico, que incluían aumento de aranceles y otras barreras comerciales para proteger sus propias industrias nacionales. Esto hizo más difícil para los productos británicos competir en los mercados extranjeros.
- Mayor competencia:Gran Bretaña enfrentó una mayor competencia de otros países europeos, como Alemania y Francia, así como de Japón. Estos países también se habían industrializado rápidamente durante la guerra y estaban ansiosos por ampliar su participación en el comercio mundial.
- Pérdida de colonias:Como resultado de la Primera Guerra Mundial, Gran Bretaña perdió el control de algunas de sus colonias, incluidas partes de África y Oriente Medio. Esto redujo el tamaño del Imperio Británico y los mercados disponibles para los productos británicos.