Durante el día, el sol está más alto en el cielo al mediodía, por lo que las sombras son más cortas. A medida que el sol sale y se pone, las sombras se alargan. Esto se debe a que el sol está en un ángulo más bajo, por lo que los rayos de luz están más dispersos y crean una sombra más larga.
El solsticio de invierno ocurre en el hemisferio norte a fines de diciembre y el solsticio de verano ocurre a fines de junio. En las fechas del solsticio, el sol está más al norte y más al sur, respectivamente. Esto significa que el sol está más bajo en el cielo durante el solsticio de invierno, por lo que las sombras son más largas. El sol está más alto en el cielo durante el solsticio de verano, por lo que las sombras son más cortas.
Entonces, la longitud de una sombra depende de la hora del día y de la época del año. Las sombras no son necesariamente más largas en verano que en invierno.