Parece cada vez más difícil que la arqueología nos ofrece un hallazgo de la dimensión de Troya, la tumba de Tutankamón o los guerreros de terracota chinos. Pero no faltan schliemans y carters que hacen su trabajo de forma menos mediática y consiguen resultados tan importantes para la ciencia como los mencionados. Por cierto, ya que menciono China , el último de ellos ha tenido lugar precisamente en ese país y resulta bastante sorprendente a pesar de su modestia.
Y es que una misión arqueológica del Instituto de Reliquias Culturales y Arqueología de Ningxia que trabajó en una tumba milenaria cerca de la ciudad de Guyuan (región de Ningxia Hui) acaba de encontrar una pieza rara:una estatuilla de mármol con forma de esfinge. , un tema muy poco común en esa parte del país y en Asia en general.
Es una pieza de tamaño pequeño , treinta y seis centímetros de alto por veintiuno de largo y trece en la base. A pesar del desgaste sufrido, se ve claramente que representa una esfinge, es decir, un ser mitológico mitad humano mitad animal , con rostro de lo que parece una persona y cuerpo de león sentado sobre sus patas traseras. Por si alguien no lo tiene claro todavía, el mismo concepto que se puede ver en Egipto, junto a las pirámides de Giza, aunque a una escala bastante mayor claro está (73 metros de largo por 21 metros de alto).
La esfinge china está hecha de mármol blanco y formaba parte de un ajuar funerario en el que también había ocho figuras más de guerreros, camellos y leones del mismo material. Se encontraban en uno de los veintinueve enterramientos de la zona que se han excavado a lo largo de 2015, con prisas porque está prevista la construcción de una planta de abastecimiento y tratamiento de agua para la población local. La campaña ha permitido recuperar más de ciento y medio piezas , entre esculturas, cerámicas, bronces y hierros.
Los mármoles, extraídos el pasado mes de noviembre, muestran un conservación bastante buena y sólo algunos daños menores son visibles en la cara de la esfinge. Por lo demás, tienen un acabado excelente, según Fan Jun , jefe del equipo de arqueólogos, ya que la tumba pertenecía a Liu Jun y su esposa , un matrimonio adinerado que vivió durante la dinastía Tang (618-907 d.C.), cuya capital era la actual Xi'an.
Fan Jun explica que“las esculturas tienen un estilo con características occidentales típicas y se considera raro en China en ese período” , al igual que la piedra utilizada, poco común en el norte del país. Algo que, por tanto, podría arrojar luz sobre el desarrollo del comercio durante el período Tang; después de todo, Ningxia formaba parte de la famosa Ruta de la Seda .