1. Urbanización: El surgimiento de asentamientos o ciudades permanentes y densamente poblados es un sello distintivo de las sociedades complejas. Los centros urbanos sirven como centros para el comercio, la administración y las actividades culturales.
2. Estratificación Social: Las sociedades complejas exhiben jerarquías sociales con distintas clases o grupos sociales, como élites, plebeyos y esclavos. Esto se puede inferir de las variaciones en las prácticas funerarias, la arquitectura y los conjuntos de artefactos.
3. Arquitectura Monumental: La construcción de estructuras arquitectónicas impresionantes a gran escala, como templos, palacios y pirámides, a menudo se asocia con sociedades complejas. Estas estructuras sirven como símbolos de poder y prestigio.
4. Sistemas de escritura: El desarrollo de los sistemas de escritura permite el registro y transmisión de información, facilitando la administración y coordinación de sociedades complejas.
5. Comercio de Larga Distancia y Especialización Económica: Las sociedades complejas participan en redes comerciales de larga distancia, intercambiando bienes y recursos con regiones distantes. La especialización en la producción artesanal y la agricultura también surge como resultado del aumento de las actividades económicas.
6. Centralización política: El surgimiento de sistemas políticos centralizados, como reinos, imperios o ciudades-estado, es indicativo de sociedades complejas. Estos sistemas implican la concentración del poder y la autoridad en manos de una clase o élite dominante.
7. Obras Públicas e Infraestructuras: Las sociedades complejas a menudo emprenden proyectos de obras públicas a gran escala, como sistemas de riego, carreteras, puentes y fortificaciones, para apoyar a sus crecientes poblaciones y actividades económicas.
8. Avances artísticos y tecnológicos: Las sociedades complejas experimentan avances significativos en el arte, la arquitectura y la tecnología. Esto puede incluir la producción de obras de arte sofisticadas, el uso de nuevos materiales y técnicas y el desarrollo de herramientas y tecnologías especializadas.
9. Complejidad social y diversidad cultural: Las sociedades complejas abarcan diversos grupos culturales y étnicos con identidades, idiomas y prácticas distintas. Esta diversidad se puede observar a través de evidencia arqueológica, como variaciones en los estilos de cerámica, patrones de asentamiento y artefactos religiosos.
10. Excedentes de producción y almacenamiento: Las sociedades complejas producen excedentes de alimentos y recursos, que requieren instalaciones de almacenamiento especializadas, como graneros o almacenes, para sustentar a sus grandes poblaciones y sostener a la élite gobernante.
Al estudiar y analizar estos indicadores en el registro arqueológico, los investigadores pueden obtener información sobre el desarrollo y las características de sociedades complejas, incluida su organización social, sistemas económicos, estructuras políticas y prácticas culturales.