Figuras Históricas

Señora Yoko, reina de Senehun

Soma, más tarde conocida como Madam Yoko (ca. 1849 – 1906), fue una líder del pueblo mende en Sierra Leona.

Rey de la tribu Senehun

Señora Yoko, reina de Senehun Soma nació alrededor de 1849 en el pueblo de Gbo, Sierra Leona, en una familia bastante rica. A los 12 años, Soma va al bosque para pasar la prueba iniciática llamada Sande, que le permitirá ser iniciado por sus mayores y entrar en la sociedad secreta femenina de los Bundu. En particular, debe circuncidarse y dominar artes como la alfarería y la danza. Superando con éxito todas las pruebas, especialmente la del baile, recibe el nuevo nombre de Yoko y regresa al pueblo como una mujer dispuesta a casarse.

Su primer matrimonio con un hombre llamado Gongoima no duró y, tras su separación, Yoko se volvió a casar con Gbenjei, jefe de la tribu Taiama. A pesar de que no puede tener hijos, Gbenjei la convierte en su esposa favorita y le permite administrar las finanzas del hogar. Pero su marido muere y Yoko se casa por tercera vez. Su tercer marido, Gbanya Lango, es el rey de la tribu Senehun y un poderoso líder militar.

Reina de Senehun

En 1875, su marido fue detenido por los británicos y Madame Yoko, defendiendo su causa ante el gobernador Rowe, obtuvo su liberación. Tras este incidente, Gbanya la convirtió en su esposa favorita. Yoko también es influyente dentro de la sociedad Bundu y por lo tanto tiene cierta autoridad. Cuando su marido murió en 1878, se convirtió en jefa de Senehun y tuvo que controlar la región de Kpa Mendé; en 1884, fue reconocida como Reina de Senehun por su pueblo pero también por los británicos.

Para ganarse el favor de los ingleses y forjar alianzas, Yoko lleva a Sande al bosque y ofrece niñas en matrimonio a los británicos. En lugar de arriesgarse a un derramamiento de sangre, prefiere cooperar y tratar de mantener los beneficios para su pueblo. Esta estrategia no agrada a todos y muchos critican a Yoko –ahora llamada Madam Yoko– por ser demasiado complaciente con los británicos. Cuando impone un impuesto a los ingleses, los subjefes organizan un complot contra ella y debe refugiarse en la policía británica.

En 1906, Madame Yoko murió y los rumores dicen que se suicidó; El misterio en torno a los motivos de este gesto no se despejará. Ante el anuncio de su muerte, a pesar de los desacuerdos en torno a su política frente a los ingleses, todo su pueblo se siente invadido por la tristeza.


Publicación siguiente