Sacco y Vanzetti:
- Nicola Sacco nació en 1891 en Torremaggiore, Italia, y emigró a Estados Unidos en 1908. Trabajó como zapatero y participó activamente en el movimiento anarquista.
- Bartolomeo Vanzetti nació en 1888 en Villafalletto, Italia, y emigró a los Estados Unidos en 1908. Trabajó como vendedor ambulante de pescado y también participó activamente en el movimiento anarquista.
El 15 de abril de 1920, un pagador y su guardia murieron durante un robo en la fábrica de zapatos Slater and Morrill en South Braintree, Massachusetts. Sacco y Vanzetti fueron arrestados poco después del robo y juzgados en mayo de 1921. El juicio fue muy publicitado y atrajo considerable atención en todo el país.
El caso de la fiscalía contra Sacco y Vanzetti fue en gran medida circunstancial. La principal prueba en su contra era el hecho de que ambos habían sido vistos en las inmediaciones del robo y que ambos habían intentado huir del país después de cometido el crimen. Sacco y Vanzetti mantuvieron su inocencia durante todo el juicio, y sus partidarios argumentaron que estaban siendo incriminados debido a sus creencias políticas.
En julio de 1921, Sacco y Vanzetti fueron declarados culpables de asesinato y condenados a muerte. Su caso fue apelado ante el Tribunal Judicial Supremo de Massachusetts, pero el tribunal confirmó sus condenas en 1924. El caso también atrajo la atención internacional y se llevaron a cabo protestas en muchas ciudades de todo el mundo pidiendo su liberación.
En 1925, el gobernador de Massachusetts nombró una comisión especial para revisar el caso. La comisión no encontró nuevas pruebas para exonerar a Sacco y Vanzetti, pero sí recomendó que sus sentencias fueran conmutadas por cadena perpetua. El gobernador se negó a conmutar sus sentencias y fueron ejecutados en la silla eléctrica el 23 de agosto de 1927.
El caso de Sacco y Vanzetti sigue siendo controvertido hasta el día de hoy. Algunos creen que eran inocentes de los crímenes de los que fueron acusados, mientras que otros creen que eran culpables. El caso se ha convertido en un símbolo de la injusticia que puede ocurrir en el sistema de justicia penal y continúa siendo estudiado por historiadores y criminólogos.