Inició la Reforma Protestante: Las críticas de Lutero a las prácticas de la Iglesia católica, en particular la venta de indulgencias, encendieron un movimiento religioso generalizado conocido como la Reforma Protestante. Este movimiento condujo a la división del cristianismo occidental en múltiples denominaciones protestantes.
Autoridad de la Iglesia cuestionada: Las tesis de Lutero cuestionaban la autoridad del Papa y del clero, afirmando que los individuos podían tener una relación directa con Dios sin necesidad de intermediarios. Esto desafió la estructura jerárquica de la Iglesia Católica y su pretensión de autoridad espiritual.
Sola Scriptura promocionada: Lutero enfatizó la importancia de las Escrituras por sí solas como fuente de verdad religiosa. Este principio, conocido como "Sola Scriptura", colocó a la Biblia en el centro de la teología protestante y rechazó la dependencia de la tradición de la iglesia y los decretos papales.
Interpretación individual recomendada: Lutero argumentó que todo cristiano tenía derecho a interpretar la Biblia por sí mismo, guiado por el Espíritu Santo. Este énfasis en la interpretación individual condujo al desarrollo de diversas perspectivas teológicas dentro del protestantismo.
Debates teológicos provocados: Las tesis de Lutero provocaron intensos debates y discusiones teológicas entre eruditos y líderes religiosos. Estos debates contribuyeron al desarrollo de doctrinas teológicas y dieron forma al panorama religioso del mundo occidental.
Cambio político y cultural influido: La Reforma tuvo implicaciones políticas y culturales de gran alcance, que llevaron a conflictos religiosos, guerras y transformaciones sociales. Contribuyó al surgimiento de los Estados-nación, influyó en la educación, el arte y la literatura y dio forma al curso de la historia europea.