El 12 de enero de 2010, una magnitud de 7,0 azotó Haití a las 4:53 pm hora local, dejando tras de sí devastación y más de 220.000 mil vidas perdidas. Mil de esas víctimas fueron los niños del "Orfanato Les Petits Anges du Bon Dieu" (Los Ángeles de Dios de Petit). La casa albergaba a 58 niños en el momento en que ocurrió el terremoto, mientras que un adulto sobreviviente contó entre 34 y 39 niños fallecidos bajo un mismo techo dentro del complejo. El edificio también atrapó a personas bajo los escombros de lo que solía ser el edificio. Algunos cuerpos no fueron descubiertos tras semanas o meses de estar entre los escombros