Según la historia, los griegos construyeron un caballo de madera gigante y lo dejaron fuera de las puertas de Troya como ofrenda de paz. Los troyanos, creyendo que el caballo era un regalo, lo llevaron al interior de las murallas de la ciudad. Sin que los troyanos lo supieran, el caballo estaba lleno de soldados griegos que emergieron por la noche y abrieron las puertas de la ciudad al resto del ejército griego. Esto permitió a los griegos entrar y saquear la ciudad de Troya.
El plan que involucraba al Caballo de Troya fue un brillante ejemplo de estrategia militar y engaño, y se ha convertido en una historia famosa y perdurable de la mitología griega.