Levántate antes del amanecer y dirígete al pozo comunal para recoger agua potable.
Limpie la vivienda y complete las tareas asignadas.
Parta el pan para tomar un desayuno sencillo, que normalmente consiste solo en pan, agua o quizás gachas.
Mañana - Mediodía :
Reportarse al capataz y recibir instrucciones diarias.
Comience tareas laboriosas como trabajos de construcción, agricultura o minería.
Trabajar en condiciones de calor intenso, a menudo sin descansos ni protección adecuados.
Soportar condiciones duras, incluido el polvo, los insectos y el acceso limitado al agua.
Se enfrentan a castigos corporales severos por no cumplir con las cuotas o por cualquier forma de desobediencia.
Tarde :
Breve período de descanso, pero no siempre concedido, dependiendo de la carga de trabajo.
Consuma una comida básica a la hora del almuerzo, normalmente pan y verduras, si hay comida disponible.
Reanudar el trabajo hasta que el capataz ordene terminar el día.
Tarde :
Regreso a viviendas comunitarias con otros esclavos.
Completar las tareas nocturnas asignadas por el capataz.
Prepárese para una noche de sueño rudimentaria, generalmente sobre paletas de paja dura o directamente en el suelo.
A lo largo del día, los esclavos experimentan agotamiento físico, angustia emocional y libertad de movimiento limitada. Carecen de necesidades básicas, incluida una nutrición adecuada, atención médica y cualquier sentido de autonomía. Vivir como esclavo en Egipto durante la antigüedad significaba luchar continuamente contra duras condiciones, castigos severos y luchas diarias por la supervivencia.