1907: Stalin fue expulsado de nuevo por no presentarse a un congreso del POSDR en Londres, donde había sido elegido miembro del Comité Central del partido. Más tarde afirmó que no había podido asistir debido a una enfermedad, pero es probable que en realidad se estuviera escondiendo de la policía.
1912: Stalin fue expulsado por tercera vez por presunta malversación de fondos del partido. Fue acusado de utilizar dinero del partido para pagar sus propios gastos personales, incluidos sus viajes a Europa.
Cada vez que era expulsado, a Stalin se le permitía volver al partido, en gran parte gracias al apoyo de Vladimir Lenin. Sin embargo, sus repetidas expulsiones demostraron que no siempre se le consideró un miembro fiable del partido.