Los chinos a menudo estaban dispuestos a trabajar por salarios más bajos que los estadounidenses blancos, lo que generó preocupaciones sobre el desplazamiento de empleos. Los inmigrantes chinos fueron considerados una amenaza para el bienestar económico de los trabajadores estadounidenses.
Diferencias culturales
Las diferencias culturales entre los inmigrantes chinos y los estadounidenses blancos contribuyeron a la aprobación de la ley. Muchos estadounidenses veían la cultura china como inferior y percibían a los inmigrantes chinos como una amenaza a los valores y costumbres estadounidenses.
Miedo a la dominación china
Algunos estadounidenses temían que los inmigrantes chinos eventualmente llegaran a dominar el país. Este temor se basaba en el gran número de inmigrantes chinos y en su percibida capacidad para asimilarse a la sociedad estadounidense.
Racismo y discriminación
El racismo y la discriminación jugaron un papel importante en la aprobación de la ley. Muchos estadounidenses albergaban actitudes negativas hacia los inmigrantes chinos y los consideraban inferiores a los estadounidenses blancos. Estas creencias racistas contribuyeron al apoyo a la ley de exclusión.