La dinastía Qin unificó China por primera vez en su historia y fue una de las dinastías más poderosas e influyentes de la historia de China. La dinastía fue fundada por Qin Shi Huang, quien fue el primer emperador de China. La dinastía Qin era conocida por su estricto legalismo, que era una filosofía política que enfatizaba la importancia de la ley y el orden. La dinastía también construyó muchos proyectos a gran escala, incluida la Gran Muralla China. La dinastía Qin finalmente fue derrocada por una rebelión campesina, pero su legado continúa hasta el día de hoy.