1. Aislacionismo histórico :China tiene una larga historia de políticas aislacionistas, influenciadas por su geografía, cultura y la creencia en la superioridad de su civilización. Las restricciones contra el contacto extranjero tenían como objetivo mantener la soberanía china, la integridad cultural y minimizar las influencias externas.
2. Miedo al colonialismo :China había experimentado colonización e intrusiones extranjeras en el pasado. La dinastía Qing, que gobernó China en los siglos XVII y XVIII, restringió los contactos extranjeros para evitar una mayor invasión de las potencias occidentales, particularmente después de las Guerras del Opio.
3. Protección de las tradiciones :Los gobernantes chinos buscaron preservar los ideales confucianos, las costumbres tradicionales y las estructuras sociales limitando las interacciones con extranjeros que traían ideas e influencias ajenas. Temían la perturbación de la sociedad tradicional china y la pérdida de la identidad cultural.
4. Control sobre el comercio :China reguló el comercio exterior para controlar su economía, prevenir desequilibrios y proteger las industrias nacionales. A menudo limitaron el contacto extranjero a puertos designados y establecieron regulaciones comerciales para mantener una balanza comercial favorable.
5. Estabilidad política :Las dinastías chinas fueron cautelosas a la hora de permitir contactos incontrolados con extranjeros debido a preocupaciones sobre la inestabilidad política. Temían que ideas extranjeras, como los sistemas políticos occidentales, pudieran inspirar resistencia o levantamientos contra el orden gobernante.
6. Influencia del Sistema Tributario :Durante ciertos períodos, China operó un sistema tributario, donde los países vecinos pagaban tributos y reconocían la superioridad de China. Este sistema también implicaba regulaciones sobre las interacciones diplomáticas y comerciales, restringiendo el contacto directo entre chinos y extranjeros.
7. Barreras del lenguaje y la comunicación :Las diferencias lingüísticas y la falta de comunicación efectiva dificultaron las interacciones con los extranjeros. Contribuyó además a las restricciones impuestas al contacto entre chinos y extranjeros.
Sin embargo, es importante señalar que las políticas de China con respecto al contacto exterior evolucionaron con el tiempo. El país se abrió gradualmente al comercio y las relaciones internacionales en los siglos XIX y XX, lo que llevó a un mayor contacto con los extranjeros.