- Estimuló el crecimiento de la agricultura comercial en Filipinas, particularmente el cultivo de cultivos de exportación como el azúcar, el arroz y el añil.
- Lideró el desarrollo de puertos e infraestructura marítima en Filipinas y Acapulco.
- Mayor actividad comercial y crecimiento económico tanto en Filipinas como en México.
- Introdujo nuevos productos e ideas en ambas regiones, como seda y porcelana chinas en América, y plata y tabaco estadounidenses en Asia.
Efectos culturales:
- Promovió el intercambio cultural entre Filipinas, China y México.
- Introdujo el cristianismo en Filipinas y otras partes del sudeste asiático.
- Condujo a la asimilación de las prácticas culturales españolas y mexicanas a la sociedad filipina.
- Dio lugar al surgimiento de una población criolla en Filipinas, formada por individuos de ascendencia mixta española, china e indígena.
Efectos políticos:
- Fortaleció el control español sobre Filipinas y amplió su alcance imperial en Asia.
- Provocó conflictos con otras potencias europeas, en particular los británicos y los holandeses, que también intentaban hacerse con el control de las lucrativas rutas comerciales asiáticas.
- Contribuyó al ascenso de México como un importante actor económico y político en el Imperio español.
- Mejora de la comunicación y las relaciones diplomáticas entre España y sus territorios de ultramar.
Efectos sociales:
- Intensificación de la estratificación social en Filipinas, con el surgimiento de una clase mercantil rica y la ampliación de la brecha entre ricos y pobres.
- Aumento de la migración y movimiento de personas entre Filipinas, China y México.
- Facilitó la difusión de ideas y prácticas religiosas, contribuyendo a la diversidad religiosa de Filipinas.
- Introdujo nuevas enfermedades y epidemias en Filipinas, lo que afectó la dinámica demográfica y el bienestar social.