La desobediencia civil es la negativa a obedecer determinadas leyes o reglamentos como forma pacífica de protesta. A menudo se utiliza para crear conciencia sobre un tema o para lograr un cambio social o político. La desobediencia civil suele ser no violenta y quienes participan en ella suelen estar dispuestos a aceptar las consecuencias de sus acciones, como multas o prisión.