Algunos creen que el término deriva del holandés "janke", que indica alguien que habla en voz alta. Otros postulan que "yankee" proviene de palabras de nativos americanos como "eankke" (cobarde) o "yangees" (extraños). Los confederados lo empleaban con frecuencia de manera despectiva, asociando a menudo a los yanquis con estereotipos negativos percibidos sobre la cultura y las creencias del Norte.
Después de la Guerra Civil, el uso evolucionó y "yanqui" a veces tiene una connotación menos desdeñosa y más general; no obstante, su interpretación específica puede depender del contexto más amplio en el que se utiliza.