Estado: Definido por un gobierno, un territorio fijo, una población permanente y soberanía (capacidad de ejercer autoridad e imponer leyes). No depende de la identidad nacional o etnia de la población que lo habita. Un estado es una entidad política que se caracteriza por tener un gobierno centralizado y un territorio definido sobre el cual ejerce autoridad y soberanía. Tiene el poder de elaborar y hacer cumplir leyes, así como de proporcionar servicios públicos y seguridad a sus ciudadanos. Los estados suelen estar compuestos por una población de personas que comparten una identidad, un idioma y una cultura comunes.
Nación: Un grupo de personas que comparten una identidad común basada en factores como el idioma, la cultura, la historia, el origen étnico o la raza. No tiene personalidad jurídica ni política. Una nación se define por su ascendencia, historia, idioma o tradiciones comunes. Puede existir sin Estado, ya que las naciones pueden dividirse entre diferentes Estados, por ejemplo, el pueblo kurdo.
En resumen, la diferencia clave entre un estado y una nación radica en el concepto de organización política. Un estado tiene un gobierno centralizado y un territorio fijo, mientras que una nación se define por la identidad común de un grupo de personas.