Filipinas es un país en desarrollo con una población de más de 100 millones de personas. Tiene una economía relativamente pequeña, con un PIB de alrededor de 350 mil millones de dólares. El país depende en gran medida de la agricultura, que representa alrededor del 20% del PIB. Otros sectores importantes incluyen la manufactura, el turismo y las remesas de trabajadores extranjeros.
La apertura de Filipinas al comercio mundial ha sido una parte clave de la estrategia del gobierno para impulsar el crecimiento económico y el desarrollo. El gobierno ha implementado una serie de políticas para fomentar la inversión y el comercio extranjeros, que incluyen:
* Reducir aranceles y otras barreras comerciales.
* Mejorar el clima de inversión.
* Desarrollar infraestructura.
* Promover la educación y el desarrollo de habilidades.
Estas políticas han ayudado a atraer la inversión y el comercio extranjeros y han contribuido a un fuerte crecimiento económico en los últimos años. Filipinas es ahora una de las economías de más rápido crecimiento del mundo.