1. Decadencia del feudalismo :
El sistema feudal, basado en la propiedad de la tierra y estructuras de poder descentralizadas, decayó gradualmente debido a diversos factores, incluido el crecimiento del comercio, el surgimiento de los centros urbanos y el aumento del poder militar de los monarcas.
2. Guerra de los Cien Años (1337-1453) :
El prolongado conflicto entre Inglaterra y Francia agotó recursos y debilitó a los señores feudales, reforzando aún más la autoridad de las monarquías centralizadas.
3. Guerras de las Rosas (1455-1485) :
La guerra civil en Inglaterra resultó en la consolidación del poder bajo la dinastía Tudor, fortaleciendo el control de la monarquía.
4. Consolidación del Territorio :
Los monarcas buscaron expandir sus territorios a través de conquistas, herencias y alianzas matrimoniales, lo que condujo a estados-nación más grandes y unificados.
5. Reformas Administrativas :
Se establecieron sistemas burocráticos eficientes que permitieron a los monarcas ejercer un mayor control sobre sus dominios y racionalizar la gobernanza.
6. Mercantilismo :
La doctrina económica del mercantilismo, que enfatizaba el control estatal sobre el comercio y los recursos para acumular riqueza y poder, contribuyó al surgimiento de los Estados-nación centralizados.
7. Ejércitos Permanentes :
Se desarrollaron ejércitos permanentes, lo que redujo la dependencia de las levas feudales y aumentó la autoridad real.
8. Reales Cortes y Patronato :
Los monarcas utilizaron cortes lujosas, patrocinio cultural y propaganda para realzar su prestigio, legitimar su poder y controlar la narrativa.
9. Reforma religiosa y guerras :
Los conflictos religiosos de la Reforma Protestante aumentaron aún más el poder de los monarcas, ya que reclamaron el control de los asuntos religiosos y disolvieron la autoridad de la Iglesia Católica dentro de sus territorios.
10. Ilustración y absolutismo :
Algunos gobernantes abrazaron las ideas de la Ilustración, promoviendo el concepto de despotismo ilustrado, donde los monarcas absolutos usaban su poder para mejorar a sus súbditos.
Ejemplos de monarquías absolutas durante este período incluyen Francia bajo Luis XIV (el "Rey Sol"), Rusia bajo Pedro el Grande y Prusia bajo Federico el Grande. Estos gobernantes ejemplificaron la noción de poder absoluto y control centralizado que caracterizó a muchos Estados-nación europeos antes del surgimiento de sistemas de gobierno democráticos y representativos.