La navegación ha sido esencial para la navegación marítima durante siglos y, a lo largo del tiempo, se han producido muchos avances en las tecnologías utilizadas para hacerlo. En los primeros días, los navegantes dependían de herramientas rudimentarias como mapas, brújulas y relojes de sol, pero hoy los barcos están equipados con tecnología de punta como GPS, radar y cartas electrónicas.
A pesar de los avances tecnológicos, los fundamentos de la navegación siguen siendo los mismos. Sigue siendo un desafío trazar un rumbo y determinar con precisión la posición del barco teniendo en cuenta todas las variables que presenta el océano. Las principales preocupaciones de todos los navegantes son mantener el rumbo, evitar obstáculos y llegar a puerto de forma segura y a tiempo.
Además de estas habilidades fundamentales, la navegación moderna también incluye aspectos como la comunicación con otros barcos y el tráfico marítimo, la planificación para la eficiencia del combustible y la comprensión de las regulaciones y convenciones que rigen las aguas internacionales.
En general, la navegación marítima es una habilidad fundamental que ha facilitado el comercio, la exploración y las comunicaciones en todo el mundo durante siglos y sigue siendo una parte vital de la industria marítima en la actualidad.