Historia de Sudamérica

¿Por qué la década de 1920 perjudicó al movimiento obrero estadounidense?

Varios factores contribuyeron al declive del movimiento obrero estadounidense durante la década de 1920:

1. Dislocación económica de posguerra :El final de la Primera Guerra Mundial provocó una fuerte recesión económica, lo que provocó un desempleo generalizado y una feroz competencia por los puestos de trabajo. Durante este período de alto desempleo, los trabajadores se volvieron menos propensos a afiliarse a sindicatos o participar en acciones colectivas, por temor a perder su empleo.

2. Sentimiento antisindical :El conservadurismo de posguerra contribuyó a una percepción pública negativa de los sindicatos. Los líderes empresariales y los medios de comunicación difundieron propaganda para presentar a los sindicatos como radicales, disruptivos y responsables de la crisis económica. El público en general se volvió menos comprensivo con la causa sindical, lo que hizo más difícil para los sindicatos obtener apoyo y reclutar miembros.

3. Represión gubernamental :El gobierno federal se opuso activamente a los sindicatos al aprobar leyes que restringían las actividades sindicales. Por ejemplo, la Ley de Interdictos Laborales de 1922 facultó a los tribunales federales para emitir mandatos para impedir huelgas y otras formas de negociación colectiva, limitando significativamente la capacidad de los trabajadores para organizarse y negociar mejores salarios y condiciones laborales.

4. Sindicalismo de empresa :Muchos empleadores crearon "sindicatos de empresa" controlados por la dirección. A través de estos sindicatos dominados por las empresas, los empleadores podrían ejercer control sobre las relaciones laborales y al mismo tiempo eludir los sindicatos legítimos. Esta práctica socavó los esfuerzos de organización sindical y debilitó aún más la influencia del movimiento sindical.

5. Cambios industriales :El aumento de la producción en masa y el uso cada vez mayor de la tecnología durante la década de 1920 alteró la naturaleza del trabajo. Muchos empleos calificados fueron reemplazados por puestos semicalificados y no calificados, lo que hizo más difícil para los trabajadores formar sindicatos eficaces en toda la industria.

6. Restricciones de inmigración :La Ley de Inmigración de 1924 redujo la afluencia de inmigrantes a los Estados Unidos. Los inmigrantes, que tradicionalmente habían sido una fuente importante de apoyo al movimiento laboral, disminuyeron en número, lo que redujo aún más el grupo de posibles miembros sindicales.

7. Enfoque en el sindicato artesanal :El movimiento laboral estadounidense siguió estando dominado por sindicatos artesanales que representaban oficios calificados específicos en lugar de trabajadores no calificados y semicalificados. Este enfoque estrecho excluyó a una gran parte de la fuerza laboral industrial, muchas de las cuales eran minorías o mujeres, que a menudo eran las que más necesitaban protección sindical.

Estos factores se combinaron para debilitar significativamente el movimiento laboral estadounidense en la década de 1920, dificultando que los sindicatos organizaran a los trabajadores, negociaran mejores condiciones e influyeran en las políticas laborales. La afiliación sindical disminuyó constantemente durante este período y el movimiento laboral luchó por recuperar su fuerza hasta la promulgación de la Ley Nacional de Relaciones Laborales (Ley Wagner) a mediados de la década de 1930.