En 1585, Sir Walter Raleigh envió un grupo de 100 hombres y mujeres a la isla Roanoke para establecer el primer asentamiento inglés permanente en América del Norte. Los colonos estaban dirigidos por Ralph Lane e incluían a varios hombres prominentes como John White, Thomas Hariot y Ananias Dare.
Los colonos inicialmente tuvieron buenas relaciones con los nativos americanos, pero pronto surgieron tensiones por la tierra y los recursos. En 1586, los suministros de los colonos se agotaron y se vieron obligados a depender de los nativos americanos para alimentarse. Sin embargo, los nativos americanos se mostraron reacios a proporcionar alimentos a los colonos, y los colonos finalmente recurrieron a asaltar sus aldeas.
En 1587, un grupo de 150 colonos llegó a la isla Roanoke para reforzar el asentamiento original. Sin embargo, los colonos encontraron el asentamiento abandonado y su paradero sigue siendo un misterio. La desaparición de la colonia de Roanoke sigue siendo uno de los mayores misterios de la historia de Estados Unidos.