Historia de Sudamérica

¿Los mexicanos no mostraron piedad en El Álamo?

Es cierto que las fuerzas mexicanas, dirigidas por el general Antonio López de Santa Anna, mostraron poca piedad con los defensores del Álamo durante la Batalla del Álamo en 1836. El ejército mexicano era muy superior en número a los defensores texanos, y Santa Anna había ordenado que no se diera cuartel. Esto significaba que los soldados mexicanos no debían tomar prisioneros, sino matar a todos los defensores, sin importar su edad o condición.

Como resultado, cuando el ejército mexicano finalmente traspasó los muros del Álamo, procedió a masacrar a los defensores. Se estima que entre 182 y 257 texanos murieron en los combates, mientras que el ejército mexicano perdió sólo unos 60 hombres. Los cuerpos de los defensores texanos fueron quemados o enterrados en fosas comunes y el Álamo fue reducido a cenizas.